Cancino Adentro.- El joven que esta desaparecido después de haber canjeado 5 millones cuatrocientos dieciséis mil pesos, de una empresa constructora, para la cual laboraba como mensajero.
Carlos David García Rojas de 27 años de edad quien residía en el sector Paraíso de Cancino Adentro, en una humilde vivienda en construcción, junto a su esposa y un niño, fue enviado por la empresa para la cual labora a canjear el referido cheque; luego de una forma extraña desapareció.
De García Rojas, las autoridades sospechan que huyó con cinco millones 416 mil 498 pesos pertenecientes a la compañía de construcciones Almonte Tavares.
La empresa está ubicada en la calle Max Henríquez Ureña, del sector Piantini, del Distrito Nacional, dirigida por el ingeniero Edward Francisco Almonte Tavares.
La Policía Nacional tiene detenido a su madre Clara Rojas, a su hermano, quien esta inmerso en un seminario en el aspirantazo a sacerdote, Van García Rojas y su esposa, para fines investigativo.
El padrastro Francisco Castro, lamento el hecho, asegurando que teme le haya pasado algo malo a su hijastro, a quien definió como un joven serio.
“Carlos tenia mucho tiempo laborando para esa empresa, pues quería dejarlo por la riesgocidad que tenia que asumir en sus labores, pues tenia que manejar altas sumas de dinero con muy poca seguridad” explico el joven.
Al ser cuestionado de que sabia del caso, solo se atavío a explicar que el joven se presento al banco a cambiar el cheque y luego iva a ser recogido por un capitán encargado de la seguridad de la compañía, pero que de una forma extraña se desconoce su paradero y no coge el celular privado.
“Pedimos de las autoridades policiales hacer una exhaustiva investigación del hecho y dar con el paradero de nuestro hijo” asevero Castro.
Los informes dan cuenta de que miembros de Investigaciones Criminales-Dicrim, realizan una amplia búsqueda del empleado privado a fin de dar con su paradero.
Se dijo que incluso los agentes visitaron parientes de García Rojas, pero que recibieron información de que supuestamente no saben de su paradero tampoco.
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